Masa base para pizza, de Jamie Oliver

Se que no está bien comer "fast food" muy a menudo, pero a mi me encanta... Y una de las cosas que más me gusta es la pizza. Y si encima es casera, ¡mejor que mejor!
Así que el día que tuve en mis manos el libro "La cocina italiana de Jamie Oliver" y descubrí una receta facilísima (a la vez que buena) de masa para pizza, no dudé en ponerme manos a la obra :) Y me salió bien a la primera!!! Que no siempre me pasa esto con una receta nueva, de hecho muy pocas veces... Y una vez que la masa está hecha, poner los ingredientes para la cobertura ya está chupado! Mirad que buena pinta tiene...

. Ingredientes:

. 400gr de harina de fuerza (yo a veces echo harina normal y también sale bien)
. 100gr de sémola de trigo
. 1/2 cucharada de sal marina (si no tienes, puedes echar sal normal)
. 7 gramos de levadura seca de panadería (ó 25gr de levadura fresca)
. 1/2 cucharada de azúcar moreno
. unos 325ml de agua templada

. Preparación:

Hacemos un volcán con las harinas y la sal sobre una superficie limpia y formamos un cráter en el centro. Echamos la levadura (si es seca; si la levadura es fresca se desmenuza y se mezcla con las harinas) y el azúcar en el agua tibia y mezclamos con un tenedor. Dejamos que repose 1 ó 2 minutos y echamos la mezcla en el cráter del volcán. Con el tenedor vamos incorporando la harina de la parte interior del cráter con un movimiento circular hasta que que se integre toda. Os aconsejo que no echéis todo el agua de golpe. Es mejor ir añadiendo y mezclando poco a poco para que el agua no se desborde y se salga por todas partes.

Una vez que la masa adquiera cierta consistencia y resulte demasiado dura para mezclarla con el tenedor, nos enharinamos las manos y empezamos a formar una bola con ella. Trabajamos la masa amasándola adelante y atrás, usando una mano para estirarla hacia tí y con la otra hacia el lado contrario al mismo tiempo. Lo suyo es estar al menos 10 minutos amasando, hasta que quede una masa suave y elástica.

Una vez terminada, enharinamos la masa por encima, la cubrimos con film de cocina y la dejamos reposar un mínimo de 15 minutos a temperatura ambiente (verás como se va inflando y aumentando de tamaño).

Pasado ese tiempo dividimos la masa en tantas bolas como pizzas queramos hacer. Con esta cantidad salen unas 3 pizzas medianas, pero las puedes hacer más pequeñas para que te salgan más.

Si no vas a hacer las pizzas inmediatamente, las puedes enharinar, envolverlas en film transparente y meterlas en la nevera hasta que las vayas a utilizar. También las puedes congelar si no las vas a hacer ese mismo día.

Saca la masa de la nevera unos 30 minutos antes de empezar a hacer las pizzas. Toma un trozo de la masa, enharina la superficie de trabajo y la masa con un poco de harina y estírala creando un círculo de medio centímetro de grosor aproximadamente. Corta un trozo de papel de aluminio, engrásalo con aceite de oliva, espolvoréalo con harina y coloca la base de pizza encima.

Vamos precalentando el horno a 220º-250ºC, y a continuación empezamos a distribuir los ingredientes de la cobertura. Una vez preparada, la ponemos en la bandeja o la rejilla del horno y horneamos de 7 a 10 minutos, hasta que quede crujiente y dorada. ¡Y lista para comer!

Obviamente como cobertura podéis poner lo que queráis, eso va en gustos :) Pero os digo los ingredientes que he puesto yo en las mías.

Primero he puesto una base de salsa de tomate. Yo uso una de orlando que se llama pan de pizza que está muy buena. En la primera he puesto unas rodajas de mozzarella fresca, unos daditos de pollo asado barbacoa (los he comprado ya hechos) y un poco de mozzarella rallada especial para pizzas, pero no mucho. Por último he espolvoreado con orégano seco y, ¡al horno!.

Para la segunda he puesto la salsa de tomate, he echado unas tiras de bacon cortadas en trozos y la mozzarella rallada para pizzas. He espolvoreado orégano seco por encima y listo.